¿Y cuales son mis frutos?... Esta es la pregunta que todo cristiano debería hacerse una y otra vez, la santa palabra nos habla en muchas oportunidades a cerca de los frutos, así que no podemos ignorar y mucho menos despreciar el valor tan importante que tiene para el Señor ver frutos en nosotros, frutos que por sí mismos están hablando de a quién pertenecemos y de quién somos hijos.
Vamos a comenzar trayendo a mención un par de fragmentos de la Biblia donde se nombran los frutos en el creyente..
Mateo 7: 16-21
Aquí el Señor dice :
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos.Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.Así que, por sus frutos los conoceréis.No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
En Mateo 3:8 dice el Señor Jesucristo a los fariseos...HACED, PUES, FRUTOS DIGNOS DE ARREPENTIMIENTO.
Gálatas 5:16-23
Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis. Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley. Y manifiestas son los frutos de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a éstas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
La palabra del Señor es muy sencilla y de fácil entendimiento, así que no hay excusas
Leemos claramente que los frutos de la carne son totalmente perjudiciales, son esas conductas que muchas personas que aún siendo creyentes siguen practicando, adulterio, fornicación y muchos pecados sexuales, recuerda que el adulterio ya es pecado desde el mismo instante en que se codicia a la mujer o al hombre ajeno, se fornica también desde el momento en que los malos deseos se incuban en la mente y corazón.
No podemos seguir cultivando la mediocridad en nuestra fe, no podemos seguir en esa tibieza que tanto ofende a nuestro Salvador, o somos correctamente obedientes o simplemente no estamos haciendo nada bien.
Parece muy duro aveces, pero el Señor exige Santidad, porque así como la misma palabra lo dice, sin santidad nadie vera a Dios, esforcémonos por entrar y atravesar esa puerta angosta, porque muchos querrán entrar pero no lo conseguirán, por causa de sus pecados, por causa de la desobediencia.
El reino de los cielos es para los valientes, esos valientes que se esfuerzan en hacer de la palabra de Dios su guía, su ley y estatutos a obedecer, obedecemos las leyes terrenales, pagamos impuestos, pagamos las cuentas, respetamos las señales de tránsito, y ahora le preguntó a usted porque no ha podido obedecer a Dios? Cuando aún usted sabe que el es el único que le dará vida eterna...?
Le quiero animar a comenzar desde hoy mismo a obedecer la palabra, antes de esto usted debe leerla y así mismo conocerla para que usted sepa de esta forma que es lo que agrada al Señor y en que debe obedecer.
Para empezar le dejo a ustedes este pequeño cuestionario, al estilo de una evaluación o test, donde usted puede tener en cuenta en que esta fallando, y ponerse la meta de conseguir ser un hijo obediente y verdadero creyente en el Señor, le recomiendo hacer una impresión de este test y auto evalúese continuamente bajo la luz y verdad de la palabra del Señor Dios todo poderoso
GUARDE ESTA IMAGEN E IMPRIMA ESTE CUESTIONARIO
O HAGA EL SUYO, EN SU AGENDA PERSONAL Y MANTÉNGASE AL TANTO Y CONFRONTE SU VIDA, COMPORTAMIENTO Y OBEDIENCIA CON LA PALABRA SU META DEBE SER COMENZAR A OBEDECER LA PALABRA DE DIOS